Mi respuesta a «MORRO»

 

Esta mañana leía con gran espanto un artículo de Opinión (Aquí puedes leerlo completamente) publicado en Las Provincias llamado “Morro”. Aunque estoy algo de acuerdo con el primer punto que habla de que hay una ciencia “oficialista” de la que no se puede salir para no ser tachado de astrólogo o alquimista, no deja de ser el reflejo de una ciencia que se mueve entre grandes paradigmas o marcos teóricos.

Lo que no entiendo de ninguna manera es el radical ataque a la paleontología, y por extensión, a la geología.

Decir  que cree menos a la paleontología que a la Bruja Lola, con todos mis respetos, me parece una estupidez como un piano de los grandes de cola, entre otras porque la Bruja Lola no es ningún referente científico con la que podamos establecer comparaciones.

Pero yo creo que todo este problema tiene un trasfondo mucho mayor, y es que mucha gente se niega a aceptar conceptos como la evolución, el tiempo geológico y que no somos más que una especie más entre las miles de millones que habitan la Tierra.

No sé qué problema se le puede plantear a alguien con el descubrimiento de nuevas especies de dinosaurios, cuando cada año se descubren cientos de nuevas especies vivas que no conocíamos y con las que llevamos conviviendo bastante tiempo, que curiosamente no han aparecido de repente sobre la faz de la Tierra.

En vez de alegrarse porque como en sus palabras con “dos huesos mal tirados” se es capaz de reconstruir un organismo que ya no existe gracias a la investigación, se plantea con esa un chiste, un paroxismo cómico que pretende dejar en entredicho el trabajo de cientos de científicos que dedican todo su esfuerzo y su vida a avanzar en el conocimiento de la historia de la vida y su evolución en la Tierra.

Por si fuera poco también utiliza como referencia temporal “una edad aproximada de dos tortugas y media”. No es la primera vez que veo a alguien cargar contra el tiempo geológico porque cuesta mucho aceptar que la Tierra tiene más de 4.000 millones de años, porque para muchos sigue teniendo la edad del génesis, que ahora mismo no sé dónde andará. ¿Diez mil años?. El concepto del “Tiempo profundo” es algo que debería de estudiarse desde pequeños para que luego no causase mucho shock, para que fuese aceptado con normalidad en nuestra sociedad y no como algo exagerado.

Desde luego si lo que pretendía era ridiculizar de alguna manera el trabajo de nuestros investigadores, de nuestros científicos, lo ha hecho desde un punto de vista bastante ignorante, poco riguroso y usando metáforas chistosas con poca gracia. Igual fue simplemente una pataleta o un ataque de celos.

Quizás esto debería de servirnos a los geólogos para darnos cuenta de que quizás va siendo hora que dediquemos más esfuerzos a la divulgación, que nos creamos por fin que somos una ciencia que debe ser conocida por todo el mundo para evitar problemas de comprensión e interpretación tan graves como estos. Porque todos vivimos sobre la Tierra. Todos.

Leave a Comment

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.