Sé que uno de los temas más recurrentes del blog es el de la crítica a la divulgación de la ciencia en general y de la geología en particular, pero desde el terremoto de Lorca del pasado 11 de Mayo de 2011 me ha quedado todavía más claro que aún tenemos mucho por hacer científicos, comunicadores y el sistema educativo para educar a la sociedad sobre los riesgos naturales.
Otro episodio sísmico de apariencia similar, pero mucho más catastrófico, fue el de L’Aquila (Italia) de 2009. Por este evento ahora mismo hay imputados siete sismólogos acusados de no haber predicho el terremoto para haber podido evacuar la ciudad.
Tengo claro que toda la responsabilidad de que la geología no tenga permeabilidad que debería tener no es solo nuestra, pero día a día hay que ir haciendo esfuerzos porque la geología sea cada vez más visible y entendible al mayor número de personas.
Y digo esto por una cosa. Recuerdo perfectamente el día 11 de Mayo cuando al encender la televisión para tener información a “tiempo real” del terremoto, pusimos TVE1 y el reportero que había en Lorca decía algo así como “Nos han dicho que habrá otro terremoto a las 20.00”. Yo, que he vivido algún que otro terremoto, también he llegado a escuchar cosas de ese estilo, rumores que se extienden en los momentos de pánico y que nadie sabe de dónde salen, pero solo contribuyen a asustar aún más a la población.
Si consiguiéramos educar de una manera mejor a los ciudadanos sobre los desastres naturales, seguramente una gran parte de la mitología desaparecería, e incluso es posible que más de uno se planteara si la casa donde vive cumple la norma sismoresistente de la zona.
Es normal que la gente tenga miedo, sobretodo cuando los terremotos no se pueden predecir, pero para que la gente no tenga miedo hay que decirles que son los terremotos y que hay que hacer en caso de que ocurra uno. Y eso es una cuestión que también compete a las autoridades.
En un sistema educativo donde la geología ha pasado a un tercer plano casi vestigial, se ha perdido una gran oportunidad de enseñar a nuestros ciudadanos que vivimos en un país en el que hay riesgo sísmico y cuáles son las cosas a hacer o evitar en caso de terremoto.
Ahora mismo hay siete personas imputadas en Italia por “bajar la guardia” a los habitantes de L’Aquila ya que supuestamente alguien anteriormente, un técnico había dicho que los niveles de radón eran más altos de lo habitual y que eso llevaría a un terremoto. Por desgracia, de momento, no hay ningún método efectivo de predecir los terremotos a corto plazo.
Pero sin embargo, los medios de comunicación siguen haciéndose eco de las predicciones de adivinos,magufos y otros seres a los que la ley les ampara, ¿O es que nadie se acuerda de las pérdidas económicas que ocasionó la predicción que alguien hizo sobre la destrucción de Roma el día 11 de Mayo?. Pero esa persona que hizo una afirmación gratuita, en cambio, está viviendo la vida, libremente y sin ningún cargo de conciencia. Y por supuesto tuvo su minuto de gloria en los informativos de todo el mundo.
Sin embargo a la geología y demás ciencias de la Tierra se les suele dedicar un tiempo y espacio ínfimo en los medios de comunicación, lo cual dificulta nuestra labor de normalización en la sociedad.
Como conclusión, me gustaría seguir animándoos a que escribáis, hagáis blogs y luchéis por la divulgación de la geología. Nosotros tenemos que ser los más convencidos de que ese esfuerzo merece la pena. Juntos somos más.

